UN BUEN DESAYUNO


Un desayuno saludable debe incluir como mínimo (¡ojo!, esto es la base): una ración de lácteos, 1 ración de cereal y 1 ración de fruta. Sin embargo, es recomendable que esta estructura básica vaya variando de alimentos dentro de cada grupo. Es decir, no siempre tomar la misma fruta o el mismo cereal. De esta forma nos beneficiaremos con total seguridad de los diferentes nutrientes presentes en los distintos alimentos.

-Los lácteos aportan minerales como el calcio, el fósforo y el magnesio, y vitaminas liposolubles (A y D) e hidrosolubles (B1, B2, B6 y B12), proteínas e hidratos (sobre todo lactosa) y grasa saturada (queso, requesón, yogur, leche).

-Los cereales son ricos en hidratos, proteínas y vitaminas (B), minerales como el sodio, el potasio o el magnesio, aportan un escaso contenido en grasas: (pan, biscotes, cereales de desayuno, harinas, maíz, arroz…)

-La fruta es rica en hidratos sencillos (fructosa, glucosa), fibra, vitaminas antioxidantes (vitamina C y provitamina A), minerales como el potasio, el magnesio y agua.

1 ración de lácteos equivale a:
1 tazón de leche (200-250 ml), mejor semidesnatada.
2 yogures (250 grs.)
1 trozo de queso (90-120 grs. si es fresco, 40-50 grs. si es curado)

1 ración de fruta equivale a:
Unos 120-200 grs. de cualquier fruta
150-200 ml de zumo con pulpa.

1 ración de cereales equivale a:
2-3 rebanadas de pan (50-60 grs.)
4-5 galletas tipo maría
2 puñados de cereales de desayuno (40-50 grs).