Después del ejercicio, ¿es aconsejable tomar una bebida isotónica o hipertónica?

Después del ejercicio, ¿es aconsejable tomar una bebida isotónica o hipertónica? (Juan Alcaide. Montoro).

La función principal de los líquidos es la de mantener un equilibrio osmótico corporal adecuado, regulando la pérdida de agua, hidratos de carbono simples (glucosa, fructosa, glucosa) o complejos (polímeros de glucosa, maltodextrinas) y electrolitos (sodio, potasio, cloro, fósforo, magnesio y calcio)., tanto fuera como dentro de las células, y eso antes, durante y después del ejercicio. Lógicamente la necesidad de hidratación varía en función de la intensidad y duración de cada deporte.
Las bebidas isotónicas contienen una concentración similar de electrolitos que nuestras células, por lo tanto, si las consumimos durante la práctica deportiva se restablecen las pérdidas minerales producidas por el sudor y mantienen un nivel adecuado de hidratación, lo que favorece la rápida y óptima asimilación de sus componentes. Si el ejercicio es intenso, el ambiente es caluroso o se suda mucho, tomar una bebida isotónica ayuda a reponer líquidos, electrolitos (sobre todo sodio y cloro) y energía (glucosa), perdidos durante el esfuerzo. Ayuda a retrasar la fatiga, evitar lesiones por calor (calambres y síncope), mejorar el rendimiento y acelerar la recuperación. Asimismo es un buen reconstituyente para el organismo después de una prueba deportiva, donde tras el esfuerzo se ha perdido agua, hidratos y electrolitos.
Por su parte, una solución hipertónica es aquella que tiene mayor concentración de sales en el medio externo, por lo que una célula en dicha solución pierde agua debido a que la diferencia de presión (presión osmótica) hace que salga agua de la célula para contrarrestar la concentración electrolítica del exterior, llegando incluso a morir por deshidratación. Cuando la pérdida de sudor no es alta y, por tanto, no es necesario tomar muchos líquidos, pero se ha de aportar energía en forma de hidratos de carbono, las bebidas hipertónicas sí son una opción apropiada. Si en esta situación, en vez de tomar una bebida hipertónica, el deportista se decanta por una isotónica o una hipotónica (de concentración inferior al 6%, como el agua), no recibe la cantidad suficiente de hidratos de carbono y corre el riesgo de sufrir una pájara.